– El dirigente estatal de MORENA ha vendido candidaturas y presionado a alcaldes, acusa Guadalupe Porras
– Su hermano, Alejandro Porras, es compadre de Zepeta, lo que le permitió atestiguar corrupción
La ahora exintegrante de MORENA, Guadalupe Porras Marín, quien hacía trabajo de mujeres en el Distrito 13, acusó actos de corrupción y un mal manejo por parte del presidente estatal Estaban Ramírez Zepeta, por lo que decidió abandonar el partido y unirse al PRI para apoyar a José Yunes Zorrilla y a los candidatos de “Fuerza y Corazón por México” y “Fuerza y Corazón por México por Veracruz”.
“Mucha gente en MORENA, muchos jóvenes, sobre todo mujeres, hemos tenido grandes ataques. Hemos pasado por mucha violencia política en razón de género y nos hemos hartado de esas situaciones. Todo el equipo de Huatusco y del Distrito hemos sido también atacados. Hemos visto actos de corrupción, hemos visto de todo lo que no queríamos, lo que no queremos formar parte, de lo que no queremos ser cómplices”, comentó.
Dentro de estas acciones destacó la venta de candidaturas, presión a alcaldes, coacción con funcionarios públicos y bloqueo de liderazgos de mujeres, ya que dijo que ella junto a compañeras fueron bloqueadas en el distrito. “Es muy triste ver a un dirigente que lastima mucho y que no toma en cuenta a los jóvenes y que es él y muchos otros los culpables de que hoy nos estemos levantando”.
Señaló que su hermano Alejandro Porras Marín es compadre de Ramírez Zepeta y en este proceso electoral tiene la cuarta posición a la candidatura plurinominal por el Distrito 13, por lo que su cercanía le permitió ver este tipo de actos.
Reveló que ha recibido mensajes advirtiéndole de represalias en su contra, por lo que buscó a los liderazgos para sentirse arropada y por ello se presentaron con Pepe Yunes para hacerle ver la situación. Porras Marín aseguró que hay muchos morenistas que tienen “voto oculto”, por lo que previó que el candidato de la oposición gane la gubernatura por el voto de castigo.
“El voto de castigo es porque hemos quedado decepcionados de la forma en que trabajan los diligentes. Esto lo (señalo) muy precisamente por Estaban Ramírez Zepeta, nos ha tocado ver y también vivir esa presión, esa situación de las malas elecciones en los candidatos, de la amenaza, de muchas condiciones difíciles incluso para los alcaldes de la zona y definitivamente el voto de castigo y más que nada el pensar y el criticar un proyecto que ha estado fallando aquí en el Estado y que por supuesto vemos una nueva ola de esperanza con el licenciado Pepe va a impactar mucho en esta nueva elección el 2 de junio”.